La hermana Natividad ya viste el hábito de San José de la Montaña
Tras la supresión canónica de la casa en Torredonjimeno de las Hermanas Misioneras del Padre Nuestro, la Hermana Natividad ha sido acogida en una nueva Congregación, la de las Madres de Desamparados y San José de la Montaña. Una congregación nacida para la ayuda de los más desfavorecidos, jóvenes, personas sin recursos y tercera edad. Una emotiva celebración, en la que estuvo acompañada de la Superiora General de la orden, la Madre Paloma.
Se llama «Congregación de Madres de Desamparados y San José de la Montaña» para significar con el nombre de «madres» que sus religiosas, atraídas por la caridad, han de ser para los desamparados lo que las madres son para sus hijos por el amor natural. La Congregación está consagrada al Corazón de Jesús y a la Virgen de los Desamparados, puesta bajo el patrocinio de San José y Santa Teresa de Jesús y confiada a la tutela del Arcángel San Rafael.
El fin de la Congregación es la gloria de Dios y la santificación de sus miembros mediante la vivencia de nuestro carisma: vivir en la Iglesia el seguimiento de Cristo, configurándose con su actitud de caridad misericordiosa, de amor total que sale al encuentro de las necesidades materiales y espirituales para remediarlas, mediante la práctica de los votos públicos de Castidad, Pobreza y Obediencia, y la observancia de sus Constituciones y Directorio.