Cartas a San José

San José, Patrono de la Iglesia Universal, es uno de los santos más queridos de la Iglesia. Y no es para menos, ya que tuvo la hermosa misión de ser el padre adoptivo del Hijo de Dios, y ser custodio de Jesús y de María Santísima. Por esta razón no es de extrañar que a él se acuda ante toda necesidad.

Son miles las cartas que San José recibe cada año. Estas son depositadas junto a la Imagen de San José de la Montaña en la Capilla que lleva su nombre en la explanada principal del Santuario.

Anualmente las Madres de Desamparados y San José de la Montaña invitan a todos los devotos que puedan acercarse al Santuario a una Solemne Ceremonia en la que se bendicen dichas Cartas y se queman.

El humo asciende como símbolo de nuestros deseos, peticiones, anhelos y buenos sentimientos; aquellos que los devotos compartimos con el Santo.

Tradición Quema Cartas

Las cartas están expuestas en cestas durante la Misa de 12h y son llevadas en procesión por devotos y miembros de la Asociación San José de la Montaña al exterior. Allí, en la fuente de la explanada junto a una imagen de San José de la Montaña se bendicen y se queman. A pocos metros una estatua de Beata Petra de San José acompaña a los participantes en la ceremonia.

La tradición vine de una feligrés que se hallaba enferma y le dejó a la fundadora una nota con una petición. Tras su curación, se extendió la costumbre, que luego llegó a Valencia, donde se viene realizando desde 1893, cuando la Congregación comenzó su presencia en la ciudad. Esta hermosa tradición se ha expandido en prácticamente todos los lugares donde tienen presencia las madres de desamparados y San José de la Montaña.

Es así que durante todo un año las religiosas Madres Desamparados y San José de la Montaña  reciben cientos de cartas que devotos escriben implorando algún favor de Dios por intercesión de San José. Las cartas llegan a la  comunidad o son enviadas por correo postal.

Peticiones a San José

 

«La gente pide mucho sobre asuntos de trabajo, de familia, problemas familiares, unión de la familia. También hay quien pide bebés; matrimonios jóvenes que no pueden tener familia también se encomiendan a San José, y muchas veces resulta gente que viene y presenta al niño a San José, porque dicen que por intercesión de San José han tenido un hijo», comenta la hermana Purificación Moya, quien es citada por AVAN.

Todas las cartas que se reciben son quemadas el 19 de marzo, solemnidad litúrgica de San José, como lo hacía la beata Petra. Todo como un gesto simbólico de que lo que allí está escrito sube al cielo y es entregado al Patrono de la Iglesia Universal. «Igual que sube el humo, con él, suben las peticiones y, de esta forma, llegan más rápidas al Señor», comenta la religiosa

Cartas a San José

Recuerde que puede hacer llegar las cartas, t